Al
arquitecto Alejandro Luna Ledesma se le reconoce más su legado escenográfico
dentro de la historia teatral mexicana, sin embargo, la danza también se ha
beneficiado con su talento, dentro de ese gremio, el artista es admirado por
sus creaciones en grandes montajes basta mencionar su participación en la
escenografía de la coreografía El viaje a la luna o Viaje a la X (De la Luna a
la Tierra) de Raúl Parrao. La mancuerna fue sui géneris, ya que se conjuntó la
danza bizarra de Parrao con la propuesta del arquitecto Luna, quien utilizó una
pantalla plana como en los inicios del cine y su entorno, al plano
tridimensional virtual con elementos multimedia, micas especiales y juegos de
luz con el propósito de respetar la idea del ilusionismo.
El
arquitecto también es diseñador, iluminador y escenógrafo, comenzó a hacer
teatro a los 18 ó 19 años de edad, cuando estudiaba arquitectura en la UNAM y
poco a poco, fue descubriendo la magia de la escenografía. El momento en que
este destacado escenógrafo encontró su vocación teatral y decidió unirla a la
arquitectura ocurrió cuando cursaba materias de arte dramático en la Facultad
de Filosofía y Letras. En la arquitectura teatral se inicio asesorando al
arquitecto José Villagrán García en los proyectos de los teatros de los
planteles Coyoacán, La Viga, Mixcoac, Tacubaya e Insurgentes Norte en la
Escuela Nacional Preparatoria de la UNAM.
Ha
dedicado cuarenta años de su vida a la creación de espacios y es por ello que
acaba de ingresar a la Academia de Artes. También ha participado en el diseño
de largometrajes y series en televisión. Como académico fue director de la
carrera de diseño teatral en el Centro Universitario de Teatro entre 1981 y
1985, entre 1989 y 1991 encabezó la Dirección de Teatro del Instituto Nacional
de Bellas Artes, también ha impartido cursos en instituciones de enseñanza
superior del país y en el extranjero Por eso es uno de los escenógrafos más
importantes que tiene nuestro país.
Entre
los teatros que el arquitecto asesoró se encuentran el “Juan Ruíz de Alarcón”,
el Sor “Juana Inés de la Cruz”, la Sala “Miguel Covarrubias” y el Foro del
Centro Universitario de Teatro, todos ubicados en el Centro Cultural
Universitario de la UNAM. Gran parte de las obras donde Luna realizó las
escenografías fueron producidas por la Universidad, entre éstas destacan: Tío
Vania, de Chéjov, y De la vida de las marionetas, de Bergman, dirigidas por
Ludwik Margules; Reso, Y con Nausistrata, ¿qué? y La historia de la aviación,
escritas y dirigidas por Héctor Mendoza; Minotastas y su familia, escrita y
dirigida por Hugo Hiriart; La mudanza y La visita del ángel, ambas de Vicente
Leñero, dirigidas por Adam Guevara e Ignacio Retes, respectivamente; Armas
blancas, de Víctor Hugo Rascón Banda y El príncipe de Hamburgo, de Heinrich Von
Kleist, dirigidas por Julio Castillo; y Lástima que sea puta, de John Ford,
Miscast, de Salvador Elizondo y El hacedor de teatro, de Thomas Bernhardt,
dirigidas por Juan José Gurrola. También es el creador de la escenografía e
iluminación de El Cascanueces, versión contemporánea que dirigió la coreógrafa
Adriana Castaños. En esta pieza, jugó con los planos, las dimensiones y las
atmósferas.
Actualmente,
el arquitecto y escenógrafo Alejandro Luna Ledesma asesora a la Universidad de
Guadalajara en el proyecto de su Centro Cultural que incluye el Auditorio
Metropolitano (rebautizado como Telmex y ya en funciones), y tres teatros; al
arquitecto Daniel Bermúdez, en el Teatro “Julio Mario Santodomingo” en Bogotá,
Colombia; al arquitecto Teodoro González de León, en el Teatro Metropolitano de
Querétaro; y a la Secretaría de Cultura del Gobierno de la Ciudad de México, en
el Teatro Vizcaínas, entre otros. Usted, estimado lector puede ver todo su
trabajo que estará expuesto en el Museo Nacional de Arquitectura del Palacio de
Bellas Artes, hasta el cuatro de noviembre, no se lo pierda.
Octubre,
2012