La ciudad como una obra de arte. Francisco Toledo y Oaxaca. Por Irving Sánchez García

“Nuestros proyectos se limitan a levantar una voz en defensa 
de diferentes culturas, su entorno natural y sus raíces históricas, 
de tal manera que puedan vivir juntos y enriquecerse mutuamente.”

Francisco Toledo

Stanley Kubrick en la Cineteca Nacional. Por Luis Eduardo Echeverria Aguilar

A 17 años de su muerte, quien es considerado por muchos como uno de los directores de cine más influyentes del siglo XX, debido a su capacidad crítica, artística, futurista y por abordar diversos géneros, se presenta por segunda ocasión en tierras mexicanas, una retrospectiva de los 40 años de trabajo cinematográfico del célebre director norteamericano Stanley Kubrick. Esta exposición hace escala en nuestro país, después de haber estado en ciudades como Frankfurt, París, Berlín, Toronto, Los Ángeles y Monterrey.

Consecuencias y motivos del gasolinazo. Por José Ángel Campos Salgado

Dice Massimo Cacciari que la ciudad no es solamente un lugar sino las formas que adopta la vida urbana y tiene razón, pues la ciudad se vuelve más ciudad cuando sus habitantes ocupan sus espacios. Esos espacios, en teoría, son de todos. Pertenecen a la colectividad y podemos llamarle “polis”, como le denominaban los griegos, o “civitas” como se llama en latín y su sentido es el mismo: un lugar que es la sede de una etnia que tiene su propio “ethos” o bien, el asiento de un grupo de ciudadanos que aceptan las mismas reglas para convivir en la “urbis”, aunque tengan diferentes orígenes étnicos, dice el mismo Cacciri. Solamente que, en nuestros días, esa concepción paulatinamente se ha ido perdiendo. 

Monstruosismos. Por Luis Eduardo Echeverría Aguilar

La diversidad en las manifestaciones artísticas ha creado un sin fin de mundos paralelos que advierten formas diferentes de percibir y expresar temores, traumas y obsesiones, dentro de un contexto que se rige por una estética que cada vez más degrada nuestra condición humana. El arte se ha emancipado de la armonía y belleza de la sociedad, a través de los monstruos que radican en nuestra imaginación, los cuales nos ayudan a amplificar nuestra capacidad perceptiva y creativa.