En los años 80 del siglo
pasado surgió un movimiento, en aras de reivindicar la identidad cultural
latinoamericana, frente al dominante eurocentrismo. En 1985 en Buenos Aires se
realizó el primer Seminario de Arquitectura Latinoamericana, los llamados SAL y
que se han efectuado sin interrupción cada dos años en diversas sedes, entre
ellas, Sao Paulo, Manizales, Bogotá, Santiago, Panamá, Tlaxcala, Oaxtepec y el
más reciente en Santo Domingo en 2015. Encabezados por Ramón Gutiérrez, Marina
Waisman, Christian Fernández Cox, Enrique Brown, Hugo Segawa, Silvia Arango,
Ernesto Alva, Concepción Vargas y Rodolfo Santa María entre muchos otros. A lo
largo de los años, los SAL han tenido sus altibajos, pero al final se ha
mantenido el espíritu por reconocernos por lo que somos culturalmente, y que
respuestas damos como arquitectos ante los grandes desafíos del nuevo siglo.
En 2007, en el SAL de
Concepción, Chile, hubo una primera charla para crear un Observatorio de
Arquitectura Latinoamericana, entre algunos de los asistimos a ese evento,
formalizándose en los dos años siguientes y con Bogotá como sede del primer
seminario. Así nació el Observatorio de Arquitectura Latinoamericana
Contemporánea (OALC), con investigadores de la las universidades de Sao Paulo,
Brasil y Nacional de Colombia, además de los miembros del área Procesos
Históricos y Diseño de CyAD-X. El objetivo era registrar e identificar las
características de la arquitectura reciente de nuestros países, a través de las
intenciones de los arquitectos, y más en particular, desde los fenómenos
urbanos. Precisamente esta lectura desde los fenómenos surgió como propuesta
desde el grupo mexicano en la reunión de 2013 en la UAM-X, y para el siguiente
año los colombianos plantearon, a través de un texto y cuaderno interno de
discusión, definiciones más acabadas. De tal suerte, el análisis de la
arquitectura latinoamericana desde la perspectiva de los fenómenos urbanos fue
clasificada en los siguientes aspectos: Construir en lo construido,
Microdetonantes, Recualificación Urbana, Nodos de Condensación e Informalidad.
Tales categorías permitieron clasificar diversas obras en Colombia y los países
andinos, así como en Brasil y México.
Cabe decir que en el
Observatorio siempre se ha reconocido las variantes de lectura, dinámicas de
trabajo y condiciones de cada grupo de investigación, que dan por resultados
interpretaciones diversas. Se reconocen criterios comunes para abordar el
análisis de las obras y los fenómenos, pero cada grupo e integrante aterriza su
lectura de acuerdo a sus propios objetivos, metodología y alcances. Así el
Observatorio se define como un grupo académico y plural, que no pretende crecer
en cuanto a sus miembros, justo para poder mantener la discusión más
enriquecedora y abierta. Los resultados ya se pueden constar a través de
múltiples fichas, exposiciones, documentos, artículos y libros. Se puede decir
sin falsa modestia que el Observatorio, después de 7 años de trabajo ya es un
referente, como fuente de interpretación sobre las tendencias contemporáneas de
la arquitectura latinoamericana. Y justo, en estos días de octubre, se realiza
un seminario más, ahora en la bella ciudad de Oaxaca, con la temática sobre la
Crítica de arquitectura desde la ciudad. La intención de realizar los
seminarios, más allá de las capitales de nuestros países, o sedes de nuestras
universidades, como pasó desde 2015 con Recife en Pernambuco, Brasil, es
precisamente abrirse a otras realidades urbanas y arquitectónicas, y no solo de
los centros culturales y económicos hegemónicos. En una entrega posterior,
reseñaremos los resultados de este nuevo encuentro.
Octubre de 2016
No hay comentarios:
Publicar un comentario