Vivimos tiempos de cambios vertiginosos,
social y ambientalmente. Al igual que la morfología del planeta, las
estructuras sociales se han transformado y se deterioran, a nivel global y
local. Las heridas asoman en los conflictos territoriales, políticos, sociales
y en las imágenes satelitales del planeta[1].
Sin embargo algunos postulados filosóficos
revaloran la importancia de un pensamiento que integre, de manera casi
aproximada a lo ideal, un sistema de conexiones entre materialidad y
subjetividad, entre tecnologías
apropiadas pero apropiables y entre principios de ética local y civilidad
mundial.
Si bien las capacidades de la sociedad y de
los sistemas biológicos necesitan para sostenerse de tecnologías apropiadas, es
necesario tomar consciencia sobre los otros aspectos inmateriales e inmanentes
que están ligados a cualquier proceso de la naturaleza y del universo. El
primero de ellos es nuestra relación con el ambiente, a lo que llamamos principios o preceptos
eco-éticos[2]; y los segundos son los aspectos antropoéticos[3], en los que se
integra, de manera casi ideal, una triada: la relación del individuo con los
seres que lo rodean y con su comunidad.
Para comprender la importancia de esta
complementariedad, pensemos en la magnífica metáfora de Juan Villoro sobre el
espejo retrovisor[4], en la que el espejo adquiere la condición de un oráculo.
Así con esta idea, la historia se comprende hacia atrás pero se vive hacia
adelante. Por eso la necesidad de recuperar un modelo holístico de observación
de la realidad, aún en tiempos de teorías de lo complejo y del caos, es
importante desde la perspectiva de equilibrio humano naturaleza, y humano comunidades.
Estas preocupaciones son ancestrales y hoy adquieren vigencia, ahora estamos
comprendiendo que el progreso no significa olvido del pasado.
El seminario fue un planteamiento de esta
visión complementaria y equilibrada. Por eso la temáticas estuvieron
intencionalmente divididas en dos ciclos: el primero de ellos correspondió a
las lecturas y realidades diversas de las comunidades y sus localidades, los
modos de comprensión individual de símbolos colectivos; los impactos de
sinceridad, honestidad y responsabilidad ambiental que detonan los principios
humanitarios de los profesionales del diseño en una comunidad; la identidad,
los sueños y el subconsciente como fuente inagotable de creatividad en el campo
del diseño y las satisfactorias experiencias que propician el trabajo con
comunidades indígenas y colectivos. El segundo ciclo de conferencias trató
temas directamente ligados con la experiencia, con el uso de ecotecnias para la
naturación en los espacios urbanos, las lecciones de habitabilidad de los paradigmas
de vivienda colectiva del pasado como base para las futuras propuestas de
diseño habitacional; y finalmente una
interesante propuesta que mostró la inserción de la teoría de la complejidad en
el diseño.
Ponencia: Neo-artesanía: diseño e innovación
artesanal, Arq. Ismael Rodríguez
Fuente:
www.facebook.com/SeminarioDisenoInnovacionYSutentabilidad
El primer fruto que espera cosechar este
seminario, es el de un cambio de actitud de nuestra comunidad universitaria hacia las problemáticas sociales y
ambientales; la re conexión de las redes comunitarias que pueden ser
venturosamente el soporte central en momentos de crisis y futuros
acontecimientos críticos dentro de nuestra universidad y fuera de ella.
Así con esta puerta abierta a la complejidad
inauguramos un camino de re conexiones favorables, en nuestras aulas y en la
producción de un nuevo conocimiento para la sociedad, desde la plataforma de
nuestra División de Ciencias y Artes para el Diseño.
[1]
Véase el artículo de la revista digital Ecoosfera
sobre las Heridas del paisaje Americano: fotos aéreas de granjas industriales. http://www.ecoosfera.com/2013/09/las-heridas-del-paisaje-americano-fotos-aereas-de-granjas-industriales/
[2] En
relación a esto las corporaciones han aprovechado las problemáticas que ellas
mismas ocasionaron ahora ofrecen soluciones verdes, tecnologías limpias,
ecología y sustentabilidad a la medida del mercado, convirtiendo estas
problemáticas en una oportunidades mercantilistas. Para mayor referencia véase
a Fernando Martín Juez, Homoindicadores, http://www.cidi.unam.mx/popup/folleto_homo.pdf
[3] Concepto
acuñado por Edgar Morin para describir una equilibrada participación humana con
sus congéneres, con otras especies y con el ambiente. Véase Edgar Morin, La
ética del género humano, documento pdf, ITAM.
No hay comentarios:
Publicar un comentario