Christian Antonio Olvera
Ramírez
El 15 de abril pasado, se
llevó a cabo a través de Facebook Live, como parte del programa del Festival Mextropoli
2021 que organiza Arquine, la mesa de diálogo Arquitectura Contemporánea Chilena Emergente, en la cual participaron
Andrea Griborio como moderadora, y los arquitectos chilenos Alberto Moletto,
Francisco Cepeda y Álvaro Ramírez Beraún. Moletto inicio su intervención comentando
que estaba realizando el proyecto del Centro Antártico Internacional, que ganó
a través de una licitación pública antes de la pandemia, sin embargo, en la
semana del 14 al 18 de octubre de 2019, estallaron diversas manifestaciones
sociales que detonaron en una nueva Constitución que se va a escribir en Chile.
Lo cual puso en pausa aquel proyecto.
Moletto dijo que en marzo
del 2020 su oficina se encontraba terminando el proyecto de restauración y
remodelación de un teatro en una galería en el centro de Santiago, en donde se
buscó mantener la misma función, y como sala de conciertos con capacidad de 200
personas. Sin embargo por el confinamiento a raíz del coronavirus, el inmueble
se convirtió en un espacio para realizar audiciones para el teatro municipal,
videos musicales y comerciales de algunas marcas de zapatos. Paralelamente su
oficina se encontraba realizando la construcción de otros edificios para
algunas universidades, pero la pandemia dejó muy incierta la ejecución ya que
no sólo había menos mano de obra sino que tampoco se tenía la certeza de la
disponibilidad total de los materiales de construcción. Al final comento que
tomaba estas circunstancias como una oportunidad para explorar otros escenarios
laborales.
Otro despacho participante
fue, OF Arquitectos (Álvaro Ramírez + Francisco Cepeda), Ramírez mencionó que una
situación de emergencia se puede asumir como un detonador para producir algo, y
de cierta manera en su oficina es una constante, ya que siempre están buscando
nuevas maneras de hacer arquitectura. Por otra parte, la autogestión según su
oficina, es otro camino que les permite crear proyectos donde invierten mucho
tiempo y trabajo pero que simultáneamente los entusiasma. Ramírez también hizo
una reflexión importante al mencionar que han aprovechado las herramientas
digitales entorno al trabajo colaborativo como BIM, las cuales les ayuda a ir
testeando y coordinando durante todo el ciclo de vida de un proyecto, de esta
manera se reduce el número de trabajadores para la realización del mismo.
Por su parte Francisco
Cepeda dijo que a partir de que Alejandro Aravena lo nombraron director de la
Bienal de Venecia en 2016, se volvió la mirada hacia la arquitectura chilena y
lo que ha producido en los últimos años. Algo en lo que coincidieron Cepeda,
Ramírez y Moletto fue en lo referido a los concursos públicos, al admitir que
para poder conseguir trabajos de gran escala era necesario participar en todos
los concursos posibles. Moletto recordó que cuando trabajó en la oficina de
Zaha Hadid, se la pasaban participando en ellos, sin embargo, en la actualidad,
no todo ha sido tan fácil debido a la alta demanda ya que, a raíz de la
pandemia, se elevó el número de participantes.
Griborio hizo la pregunta:
¿Hay que cambiar algo en el ejercicio de la arquitectura post pandemia? A lo
que Moletto mencionó que las barreras de la distancia para trabajar en diversos
lados del mundo se han hecho más difusas, debido a la conectividad de las
plataformas digitales, lo que se traduce en que los despachos pueden seguir
funcionando a pesar de los kilómetros de separación que existan entre los
involucrados, recordando que el ejercicio de la arquitectura es una actividad
colaborativa.
Griborio planteó que las
nuevas generaciones de arquitectos están siendo bombardeadas de imágenes a las
redes sociales como Instagram, pero al final sin mucho contenido detrás de esas
propuestas de diseño y que todo esto se debe a que la información que
necesitan, cabe en un teléfono celular. A lo que Cepeda mencionó que a partir
de que imparte clases, considera que las nuevas generaciones están realizando
buenos proyectos, con grandes ideas respecto a la arquitectura actual y que aprende
mucho de los estudiantes.
Para Moletto el cambio
generacional, se define en que la arquitectura es más diversa que antes. En la
actualidad muchas oficinas de gran experiencia se asocian con otras emergentes
para generar nuevos proyectos y logran resultados muy positivos, recalcó que es
algo que en su generación no se veía.
Para finalizar puedo
concluir que esta mesa de diálogo se enfocó no tanto en los trabajos de los
despachos, sino en cómo se ha ido desarrollando el ejercicio arquitectónico a
partir de la pandemia. Los puntos claves fueron las herramientas tecnológicas
que nos permiten tener toda la conectividad que deseamos para que las reuniones
presenciales sin sentido, no se lleven a cabo por temas de salud principalmente,
y otra por los largos recorridos para llegar de un punto a otro.
La arquitectura siempre ha
sido una actividad colaborativa, y al rescatar lo bueno del confinamiento por
el coronavirus, es que, gracias a la tecnología, podemos encontrarnos en
cualquier parte del mundo y llevar a cabo actividades que difícilmente se podrían
desarrollar de manera presencial. Como esta charla entre arquitectos en México
y Chile.
Abril 2021
*Pasante de arquitectura,
UAM Xochimilco.